Vigila el ataque del hongo Oídio
El hongo oídio se manifiesta en forma de manchas de polvillo blanco en las hojas, capullos y frutos de muchas plantas.
Favorecen su aparición la humedad ambiental que producen el rocío y las lluvias, y las temperaturas suaves.
Los evónimos, rosales, crisantemos, phlox, dalias, geranios, árboles como el roble y el plátano de sombra, muchos frutales (manzanos, melocotoneros, vides) y hortalizas (cucurbitáceas) son blanco de su ataque.
Si se extiende, las hojas amarillean y caen; puede provocar incluso la desecación de partes de la planta.
Prevención.
Aplica periódicamente un fungicida preferiblemente sistémico, o fumiga con un fungicida con azufre como principio activo (se considera ecológico).
Control.
Si ya ha atacado, elimina las partes afectadas y fumiga con un fungicida de contacto basado en azufre.